Farouk, Yazer, Ahmed y Omar los cuatro protagonistas principales de esta aventura, cada uno desde su perspectiva, intentan hacer ver al lector que, aunque todo se rige por status, nadie es más que nadie y que, según las circunstancias que se den, siempre habrá un momento en el que necesitemos del apoyo o la ayuda de la persona en la que menos pensamos.Confianza, honor, respeto, paciencia, valentía, ilusión, curiosidad y sabiduría son algunas de las emociones que se describen en este relato. A veces, por qué no, también algo de lo contrario. El amor y el miedo se hacen presentes en algún trazo de la historia. ¿Qué sería de una aventura sin una pizca de amor? Las parejas que se forman a lo largo del texto, en la medida de lo posible, se encargan de manifestar este sentimiento escrito en mayúsculas.Como si se tratase de un cuento de las mil y una noches, Farouk vive su buena vida, rodeado de buena gente y generando buena vibración, pues, aunque sea el amo y señor del califato, todo aquel que deambula por el poblado siente que realmente ocupa el lugar que le corresponde, ni mejor ni peor que el del vecino, simpl