Al abrir el antiguo horno de leña el olor a pan recién hecho acarició el alma de Marina. Cerró los ojos, inspiró lentamente. Olor de infancia. Olor a hogar.
Este sitio web utiliza cookies, tanto propias como de terceros, para mejorar su experiencia de navegación. Si continúa navegando, consideramos que acepta su uso. Más información